Visite uno de los palacios más grandes construidos en Europa durante el siglo XVIII, designado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El Palacio Real de Caserta es la residencia real más grande del mundo y uno de los museos más visitados del mundo. ¡Esta pequeña información parece más que suficiente para estimular su curiosidad cultural y organizar un recorrido por el Palacio Real de Caserta con su familia y amigos! Quizás un conductor privado te hará sentir privilegiado y mimado.
El Palacio Real es considerado la última gran obra maestra del barroco italiano que se completó en 1845, aunque ya estaba habitado en 1780. Es un magnífico complejo de 1.200 habitaciones con un total de 1.742 ventanas. El lado sur del edificio tiene 249 metros de largo, más alto que 37 y decorado con 12 columnas. La fachada principal tiene un frente central coronado por un frontón con otros dos avances a los lados. La fachada en el jardín es la misma que la de arriba con ventanas finamente estriadas.
El edificio cubre un área de aproximadamente 47,000 metros cuadrados con 34 escaleras. Dentro del edificio de perímetro rectangular, el edificio tiene dos bloques que se cruzan, formando cuatro grandes patios interiores de más de 3,800 metros cuadrados cada uno.
El parque actual corresponde solo en parte a la realización original del proyecto por Luigi Vanvitelli. El trabajo fue completado por su hijo Carlo, quien redujo el proyecto de su padre debido a la falta de fondos. El parque cubre un área de más de 120 hectáreas y tiene 3,3 km de largo. El agua es suministrada por el Acueducto Carolino, que fue construido al mismo tiempo que el palacio y abastece el parque, las fuentes y el palacio.
Desde la parte central de la fachada trasera del edificio, el jardín italiano está conectado al jardín inglés por el famoso canal navegable. Está formado por dos largas avenidas paralelas entre las cuales hay una serie de fuentes sugerentes y famosas:
La fuente Margherita, La fuente del delfín, La fuente Eolo, La fuente Ceres, Las pequeñas cascadas y la fuente de Venus y Adonis, La fuente de Diana y Acteón, dominada por la gran cascada.
Gracias al "efecto telescopio" desarrollado por Vanvitelli, al mirar la montaña desde el Palacio y seguir los tanques longitudinales, no se percibe que el camino sea más largo que 3 km.